¿Por Qué No Puedo Soportar los Sonidos de los Demás? La Ciencia de la Misofonía
La misofonía es una condición neurológica en la que ciertos sonidos cotidianos desencadenan reacciones emocionales intensas, como ansiedad, ira o malestar extremo. Sin embargo, existe un fenómeno curioso: los sonidos molestos en otras personas no nos afectan cuando los hacemos nosotros mismos.
Si tienes misofonía, es posible que hayas recibido comentarios como:
🔹 “Pero tú también masticas, ¿por qué te molestan los demás?”
🔹 “No tiene sentido que te afecte ese sonido si tú también lo haces.”
🔹 “Seguro que es psicológico, solo tienes que ignorarlo.”
Estos comentarios pueden ser frustrantes, pero tienen una explicación neurocientífica. En este artículo, exploramos la razón científica detrás de este fenómeno y cómo explicárselo a los demás de manera clara y efectiva.
¿Por qué sucede esto? En este artículo, te explicamos la ciencia detrás de este misterio.

¿Qué es la Misofonía y Cómo Afecta al Cerebro?
La misofonía es un trastorno del procesamiento sensorial caracterizado por una hipersensibilidad a sonidos repetitivos como la masticación, la respiración fuerte o el tecleo.
Los estudios han demostrado que el cerebro de las personas con misofonía tiene una hiperconectividad entre la corteza auditiva y el sistema límbico, la región responsable de las emociones
🔬 Un estudio de 2017, dirigido por el Dr. Sukhbinder Kumar en la Universidad de Newcastle, utilizó resonancia magnética funcional (fMRI) y descubrió que las personas con misofonía tienen una sobreactivación en la corteza insular, lo que indica que el procesamiento del sonido está directamente vinculado a respuestas emocionales intensas.
🧠 Otro estudio reveló que la conexión entre la corteza auditiva y la amígdala (el centro del cerebro que procesa el miedo y la ira) es más fuerte de lo normal en personas con misofonía.
Esto explica por qué los sonidos desencadenantes pueden provocar reacciones emocionales automáticas e incontrolables.
El Misterio de la Tolerancia a los Propios Sonidos
Uno de los aspectos más desconcertantes de la misofonía es que los sonidos desencadenantes solo generan malestar cuando provienen de una fuente externa.
🔹 Si alguien más mastica ruidosamente, la reacción es de estrés o ira.
🔹 Pero si la persona con misofonía mastica, el sonido no le afecta o lo hace en menor medida.
¿Por qué sucede esto? La respuesta está en un mecanismo cerebral llamado copia eferente.
La Explicación Neurocientífica: La Copia Eferente
La copia eferente es un sistema neurológico que nos permite predecir y filtrar los sonidos que generamos nosotros mismos.
📌 Ejemplo cotidiano: Si intentas hacerte cosquillas, no sientes la misma reacción que cuando alguien más te las hace. Esto sucede porque el cerebro anticipa la sensación y la neutraliza.
Con el sonido ocurre algo similar:
🔹 Cuando producimos un sonido, nuestro cerebro lo predice y reduce la respuesta emocional.
🔹 Pero cuando el sonido proviene de otra persona, el cerebro no puede anticiparlo con precisión, lo que activa una reacción emocional intensa en personas con misofonía.
Este es el motivo por el cual los sonidos externos desencadenan malestar, mientras que los propios no lo hacen.

Como se puede explicar la misofonía
Si tienes misofonía, probablemente te hayas encontrado en situaciones incómodas en las que alguien minimiza o malinterpreta tu malestar. Explicar la misofonía puede ser un desafío, pero aquí tienes algunas estrategias para hacerlo de manera clara y efectiva:
1. Usa Ejemplos Simples y Cotidianos
Las personas pueden entender mejor la misofonía si usas ejemplos con los que puedan relacionarse.
✅ Ejemplo de las cosquillas:
“¿Sabías que no puedes hacerte cosquillas a ti mismo? Eso se debe a un mecanismo cerebral que anticipa la sensación y la suprime. Con la misofonía ocurre algo similar: mi cerebro reacciona de forma automática a ciertos sonidos externos, pero no a los que yo mismo produzco.”
✅ Ejemplo del dolor de cabeza:
“Es como cuando tienes migraña: las luces y los sonidos que normalmente no te molestan se vuelven insoportables. Con la misofonía, mi cerebro amplifica ciertos sonidos, haciéndolos intolerables.”
2. Explica la Respuesta Automática del Cerebro
Mucha gente cree que la misofonía es una simple molestia, pero en realidad es una respuesta neurológica involuntaria.
📢 Cómo explicarlo:
“No es que decida enfadarme o sentirme ansiosx cuando escucho un sonido molesto. Mi cerebro tiene una hiperconexión entre la parte que procesa los sonidos y la que controla las emociones. Por eso, reacciono sin quererlo.”
3. Hazles Reflexionar con Preguntas
A veces, hacer que la otra persona se ponga en tu lugar ayuda a que lo entiendan mejor.
❓ Preguntas que puedes hacer:
- ¿Alguna vez has escuchado un sonido que te pone los pelos de punta, como uñas en una pizarra? Así se siente la misofonía, pero con sonidos comunes del día a día.
- Si te duele un diente y alguien toca justo en ese punto, duele mucho más, ¿verdad? Mi cerebro reacciona así con ciertos sonidos.
4. Comparte Información Científica
Si la persona está interesada, puedes mencionar estudios sobre la misofonía.
📚 Puedes decir:
“Se han hecho estudios con resonancia magnética funcional que demuestran que el cerebro de las personas con misofonía reacciona de forma más intensa a ciertos sonidos. No es algo psicológico, es una condición neurológica real.”
5. Pide Empatía y Respeto
Si alguien sigue sin comprenderlo, puedes cerrar la conversación con una petición clara:
❤️ Ejemplo:
“No necesito que lo entiendas al 100%, solo que respetes que ciertos sonidos me afectan de una manera que no puedo controlar.”

¿Qué hago si tengo misofonía?
Desde CELIA MISOFONÍA estamos ocmprometidxs a darle voz a la misofonía. Una condición neurológica real que afecta la forma en que el cerebro procesa ciertos sonidos.
Gracias a estudios recientes, y a nuestros años de experiencia y especialización, ahora entendemos mejor por qué los sonidos autogenerados no nos afectan, mientras que los externos sí.
💡 Explicarlo con ejemplos sencillos, información científica y apelando a la empatía puede ayudar a los demás a comprenderlo mejor.
Si quieres conocer más sobre la misofonía y su TRATAMIENTO, ¡CONTÁCTANOS, estaremos encantadas de ayudarte!