Misofonía y TOC: Diferencias, Causas y Tratamientos Según la Ciencia
¿Alguna vez te has preguntado si la misofonía y el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) son lo mismo?
Aunque pueden parecer similares, estos dos trastornos son muy distintos. En este artículo, exploraremos qué es la misofonía, cómo se diferencia del TOC, y qué tratamientos han demostrado ser eficaces según la literatura científica más reciente.
¿Qué es la Misofonía?
La misofonía es un trastorno donde los sonidos cotidianos, como el masticar, respirar o teclear, pueden desencadenar una reacción emocional intensa. Estos sonidos provocan ira, ansiedad, o incluso asco en quienes sufren de este trastorno. Según un estudio reciente en Current Biology (2017), la misofonía está relacionada con una conexión anormal en la corteza insular del cerebro, lo que amplifica las reacciones emocionales.
¿Qué es el TOC?
El trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) es un trastorno de ansiedad donde los individuos experimentan pensamientos intrusivos y obsesivos que causan un gran malestar. Para aliviar este malestar, realizan compulsiones o comportamientos repetitivos. Estos síntomas difieren significativamente de la respuesta automática y emocional que caracteriza a la misofonía.
Diferencias Clave entre la Misofonía y el TOC
- Síntomas
- Misofonía: Respuesta emocional de ira y ansiedad inmediata a sonidos específicos que activa respuestas fisiológicas y conductuales de lucha o huida ante el estímulo.
- TOC: Pensamientos obsesivos que generan una elevada ansiedad y en determinados casos promueven compulsiones para alivio del malestar.
- Causas según estudios actuales:
- Misofonía: Disfunción en la conexión cerebral que procesa emociones y sonidos.
- TOC: Disfunción en los circuitos cerebrales que regulan el comportamiento.
- Tratamientos:
- Misofonía: Regulación emocional, entrenamiento de la atención, flexibilización cognitiva, Exposición gradual a través de acercamiento progresivo al sonido utilizando técnicas de apoyo ante la reproducción del estímulo
- TOC: El tratamiento de la Exposición con Prevención de Respuesta (EPR) sigue siendo hasta día de hoy, el más avalado empíricamente.
*El uso de la EPR en los casos de misofonía no es recomendable, ya que puede llegar a agravar significativamente la sintomatología asociada a la misma.
Mientras que la misofonía afecta principalmente la capacidad de una persona para tolerar ciertos sonidos, el TOC puede impactar muchos aspectos de la vida diaria, desde las relaciones hasta la productividad laboral. Ambos trastornos pueden coexistir, pero entender sus diferencias es clave para un diagnóstico y tratamiento efectivos.
Referencias:
- Kumar, S., et al. (2017). The Brain Basis for Misophonia. Current Biology, 27(4), 527-533.
- Jastreboff, M. M., & Jastreboff, P. J. (2001). Components of decreased sound tolerance: Hyperacusis, misophonia, phonophobia. British Journal of Audiology, 35(3), 120-124.
- Schröder, A., Vulink, N., & Denys, D. (2013). Misophonia: diagnostic criteria for a new psychiatric disorder. PloS one, 8(1), e54706.
Si sospechas que podrías tener misofonía o TOC, es importante consultar a un profesional de la salud mental que pueda proporcionar un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento. La intervención temprana puede mejorar significativamente la calidad de vida.
